Copyright
|
![]() |
|||||
Cuando se veía rodeado por muchos policías y el sitio no era adecuado para pelear, Besouro se comportaba como todo un actor: se hacia la víctima, lloraba, pedia perdon, en fin hacia todo para ablandar la furia de los enemigos, buscando desviarles la atención, cuando los policías, sorprendidos de la actitud del temible capoeirista, se distraían, Besouro los atacaba inesperadamente, derrotándolos a todos. Besouro era tan respetado que acostumbraba a salir a las calles avisando a los comerciantes que cerrara los negocios, porque él había decretado el día “feriado”. también le quitaba los sobreros a los valientes de Santa Amaro. Un día, Besouro estaba sin trabajo y fue a buscar empleo, él trabajo toda una semana. Besouro sabia que, el día de pago, al patrón no le gustaba pagar; tenia el hábito de llamar al trabajador y decirle “quebró San Caetano”. Si el trabajador reclamaba, era golpeado, permaneciendo en un tronco amarrado durante todo el día y después lo despedía. Cuando le tocaba a Besouro recibir el pago el patrón lo llamó y le soltó su tal “quebró San Caetano”. Pues bien todos recibirán menos Besouro. En seguida Besouro invadió la casa del patrón, lo agarro por la barba y le dijo: “¿va o no va a pagar el dinero de Besouro?…” El hombre con la vos cortada contesto que si, y lo despidió. Pero la cultura de la calle no fue suficiente para Mangangá, al buscar empleo, llevo una carta de recomendación del jefe de una hacienda donde él trabajaba a otro. Sin saber leer no sabia que la carta era, en realidad, un aviso para que el jefe de la hacienda matara al capoeirista. después de pasar la noche con muchas mujeres, Besouro fue emboscado por mas de cuarenta hombres, que disparaban sin parar. De modo sorprendente, las balas no le daban, no obstante fue herido por un cuchillo, preparado de ticum, especialmente para abrir el cuerpo cerrado por la malicia. Llego vivo al hospital pero al darse Cuenta que no seria el mismo de antes prefirió morir. |
![]() |